Realmente, no. Para qué engañarnos: aunque me gustaría que fuera lo contrario, la humanidad tal como la conocemos podría seguir sobreviviendo si este blog no hubiera nacido. Pero oigan, tampoco estorba, ¿no? Y además los de Blogspot son gente muy maja y me dejan publicar gratis...
Dicen los libros de estilo de los blogs (que existen, no se vayan a pensar: en este mundo ya está casi todo inventado) que para quedar bien, la primera entrada, el primer "post" que dicen los guiris, tiene que ser una especie de presentación y declaración de intenciones. Bueno, vale, si ellos lo dicen habrá que hacerlo, no voy a llegar yo aquí de nuevas reventando las reglas. Se debería deducir por el título, pero por si acaso, repetimos, cual anuncio de natillas.
No creo que nadie esté particularmente interesado en mis marujeos personales, y si alguien lo está, dejen comentarios o manden emails y ya estudiaremos la solicitud. Y no se me ocurría ningún otro tema sobre el que generar agrias polémicas sin que la sangre llegara al río. Así que este blog va a ir de la segunda forma de entretenimiento más importante de la sociedad, siempre por detrás del noble arte del balompié: el cine.
Problema: nuestro sistema educativo es tan peculiar que ser un Señor Licenciado (trátenme de usted) en Comunicación Audiovisual no garantiza tener ningún tipo de conocimiento especial sobre la materia. Vale, sé cómo se llaman los planos y todo eso, pero, hablando en plata, no tengo ni idea de cine. No me pidan que les analice el carácter más o menos artístico de tal secuencia, o el intrincado significado oculto que el director de turno haya querido dar metiendo en escena tal objeto. Porque además, ni me va ni me viene. Yo soy de los que se sientan en la butaca (cuando la crisis lo permite; si no, me vale la tele, o la pantalla del ordenador... sí, señores de la SGAE, yo me bajo películas, qué pasa) y se limitan a ver imágenes. Mis criterios de valoración no van más allá de "me gusta - no me gusta".
Que es, si mis fuentes no me fallan, lo que hace la mayoría de la gente, el "espectador medio" no especializado, ese del que tanto hablan los listillos para decir que se traga cualquier basura. Pues yo soy de esos, y no me da ninguna vergüenza reconocerlo. Hablaremos de cine en ese plan. Sin complicarnos la vida. Con estilo más o menos bonito, más o menos acorde a las circunstancias; si ven que la cosa no cuadra, reclamaciones a don José Cabeza, profe de Crítica de Cine, una de las pocas asignaturas de la carrera en la que se aprendían cosas medio útiles (y encima era optativa).
Pues hala, al turrón. Ya me he metido en el embolao yo solo, ahora me toca ponerme a ver pelis y a escribir. De momento, voy anunciando que arrancaremos con Brokeback Mountain, que no es moco de pavo. Pero eso será de aquí a un par de días, que si lo pongo todo de golpe se pierde la intriga. Manténganse atentos.
2 comentarios:
Patitoooooooo!! Q te has aficionado al final a la fiebre bloggera!! jajaja!! Envidiosooo! Muchísimas suerte en sus nueva andanzaaaas!! besazoss!!
Me gusta que hayas abierto este blog y puede que aparezca de vez en cuando por aquí, porque el cine, también, es una de mis aficiones, aunque, como muy bien dices, cuando la economía lo permite.
Un saludo de vuestro "experto informático",
José Antonio Álvarez.
pd.(sobre la primera peli que vas a hablar, no puedo opinar, porque a verla, no he podido llegar. jajaja, jajaja, jajaja, me parto yo solo de lo que escribo)
Publicar un comentario